La Iglesia Nueva Apostólica de la A a la Z

Iglesia

La Iglesia de Cristo –tanto en su lado visible como también en su lado invisible– tiene estos cuatro rasgos característicos: unidad, santidad, universalidad y apostolicidad. A estas características de la Iglesia se las denomina “notae ecclesiae”. Se hacen realidad en las diferentes congregaciones cristianas de diferentes formas y en diferentes grados.

Donde más claramente se manifiestan estos rasgos característicos de la Iglesia de Jesucristo es allí donde están activos los Apóstoles: ellos dispensan a los vivos y a los muertos los tres Sacramentos y proclaman la palabra de Dios, cuyo punto central es el inminente retorno de Cristo. Allí está establecida la Obra Redentora del Señor. Esta hace referencia a la parte de la Iglesia en la cual están activos los Apóstoles transmitiendo aquellos dones de salvación que sirven a la preparación de las primicias, la novia de Cristo.

A la Iglesia de Jesucristo pertenecen las personas que creen en Jesucristo y que confiesan al Hijo de Dios como su Señor. Ellos están bautizados en el nombre del trino Dios, el Padre, el Hijo y el Espíritu Santo.

 

Inseminación artificial

La Iglesia no tiene objeciones básicas en contra de la realización de una inseminación artificial, en tanto se garantice que no será destruido deliberadamente ningún óvulo fecundado.

La inseminación artificial solo debería realizarse en matrimonios y con sus propios óvulos y espermatozoides.

 

Interrupción del embarazo

La Iglesia Nueva Apostólica se entiende como defensora de la vida. El óvulo fecundado ya es una vida individual que goza del derecho de protección. La Iglesia Nueva Apostólica rechaza la interrupción del embarazo porque constituye una transgresión al quinto mandamiento. La culpa frente a Dios vinculada con ella puede ser muy diferente dependiendo de la situación de vida. Aunque existieren motivos humanamente comprensibles a favor de una interrupción del embarazo, debido al alcance de la decisión debe tener un peso especial la postura de la Iglesia.

Las madres o bien las parejas que han analizado los aspectos médicos, personales y teológicos, pueden contar con que la Iglesia respetará la decisión que tomaron bajo su responsabilidad personal a favor o en contra de una interrupción del embarazo y les brindará asistencia con imparcialidad.

 

Investigación con células madre

La Iglesia Nueva Apostólica está a favor de la investigación científica acorde al encargo divino de llenar la tierra y sojuzgarla. El marco de este encargo es establecido por los Diez Mandamientos y el Evangelio de Jesús que incluyen el respeto ilimitado por la vida humana en toda su diversidad.

Debido al rápido desarrollo alcanzado en el campo de la biotecnología solamente se pueden brindar bases para tomar decisiones en áreas individuales.

  • No es aceptada la creación o destrucción de embriones humanos para fines científicos. 
  • Tampoco es aceptada la producción de descendientes genéticamente idénticos (clonación reproductiva). Asimismo, se rechaza la producción de tejidos genéticamente idénticos con fines de tratamiento (clonación terapéutica o de investigación), en tanto involucre la destrucción de embriones.  
  • Básicamente es aceptada la terapia génica somática. Es significativo aquí ante todo el riesgo médico. Una intervención en el genoma de las células germinales, que también tiene efectos no previsibles incluso en las generaciones futuras, no se justifica éticamente.