- Página de inicio
- Iglesia
- Anuncios
- Servicio divino de Pentecostés: "Confiar en la fuerza del Espíritu Santo"
Zúrich/Lusaka. Fue el punto culminante de la fiesta tradicional de Pentecostés de la Iglesia Nueva Apostólica: el servicio divino central con el cabeza de la Iglesia, el Apóstol Mayor Jean-Luc Schneider. Su mensaje central: «Confiemos en la fuerza del Espíritu Santo.»
Bajo el lema "Espíritu Santo – nuestro Guía y Consolador" se celebra la fiesta de la Iglesia Nueva Apostólica de 2015 en Zambia. Después de una asamblea con casi todos los Apóstoles de África y un concierto durante el día del sábado, decenas de miles de cristianos nuevoapostólicos se reunieron el domingo en el "National Heroes Stadium" en Lusaka. Otros millones de miembros de la Iglesia vivieron el servicio divino mediante retransmisión vía satélite, internet o radio.
Responder a la llamada de Dios
El texto bíblico de Apocalipsis 22:17 fue la base del servicio divino: « Y el Espíritu y la Esposa dicen: ¡Ven!. Y el que oye, diga: ¡Ven!» Al principio el Apóstol Mayor Schneider dedicaba algunas palabras al país anfitrión Zambia, donde la Iglesia Nueva Apostólica está fuertemente representada, con aproximadamente 1,1 millones de creyentes, más que en ninguna otra región en el mundo, siendo la excepción el país vecino, la República Democrática del Congo.
Aunque en otras partes del mundo la reacción no es la misma o incluso el número de asistentes disminuye: Para Dios las fronteras entre países no tienen importancia, subrayó el líder espiritual de la Iglesia. «Lo importante es que aquellos que son llamados por Dios respondan a Su llamada.»
La fuerza del Espíritu Santo
Donde se predica el evangelio en la Iglesia de Cristo también está presente el Espíritu Santo, dijo el Apóstol Mayor. Su fuerza ya empieza en el Santo Bautismo de Agua, como fortificación en la lucha contra el pecado. «La fuerza del Espíritu Santo llega a su pleno desarrollo en el ministerio del Apóstol», hacía referencia el Apóstol Mayor al sacramento del Santo Sellamiento. La fuerza también se puede percibir en la Santa Cena. Sólo el poder del Espíritu Santo provoca la verdadera presencia de Cristo en la hostia consagrada.
El texto bíblico "Y el Espíritu y la Esposa dicen: ¡Ven!» no sólo es una invitación del Espíritu Santo, sino también una forma en la que la comunidad expresa su deseo de tener comunión con Jesucristo. La llamada significa: «Ven, seas quien seas. Dios te ama. Él te ha perdonado». Y la comunidad respondió: «Ven, Dios te ha perdonado y nosotros también», se refería el cabeza de la Iglesia al poder del perdón, de la reconciliación y la unión.
Léase un informe exhaustivo sobre el servicio divino del Apóstol Mayor así como otras informaciones sobre la fiesta de Pentecostés en nac.today.