Recursos para una finalidad: las finanzas

La Iglesia Nueva Apostólica no cobra impuestos ni otras contribuciones obligatorias, sino que se financia con las donaciones voluntarias de sus miembros. Las contribuciones pueden ser colocadas anónimamente en las cajas de ofrendas que hay en las comunidades o transferidas a una cuenta de la Iglesia.

La gran mayoría de los ingresos se destina a la construcción y el mantenimiento de los edificios de las iglesias, por lo que beneficia directamente a las comunidades locales. La Iglesia se esfuerza por arreglarse en lo posible con pequeños aparatos administrativos. Los recursos financieros sirven exclusivamente para el cumplimiento de las tareas de la Iglesia. El control de los ingresos y los gastos es realizado por profesionales externos .

Los deberes pastorales y organizativos en las comunidades y distritos se cumplen de forma voluntaria. Cuando el compromiso se convierte en una actividad a tiempo completo, por ejemplo, a nivel del ministerio de Apóstol, también se efectúa trabajo con dedicación completa.

Todos los actos y bendiciones de la Iglesia, como Bautismos, casamientos o funerales, se realizan de forma gratuita.