Zúrich/Hyderabad. Durante la semana pasada el Apóstol Mayor estaba de visita por primera vez en el subcontinente de la India donde celebró servicios divinos en Hyderabad y Udaipur. Con esta visita llegaron a su fin los 20 años de actividad en Rajastán y otras diez provincias por parte de la Iglesia Nueva Apostólica de Renania del Norte Westfalia. Estas regiones pasarán a formar parte de la Iglesia Regional de Canadá y estarán bajo el cuidado del Apóstol de Distrito Mark Woll y del Ayudante de Apóstol de Distrito David Devaraj.

En el servicio divino del jueves por la tarde, el cabeza de la Iglesia internacional puso en descanso a cuatro Apóstoles de la India y a un Obispo de Pakistán por motivos de edad. Todos estos varones de la Iglesia habían estado activos en un ministerio entre 26 y 31 años. Por tanto pertenecen a un grupo de siervos de Dios que fueron ordenados hace muchos años y que han participado esencialmente en el desarrollo de la Iglesia Nueva Apostólica en la India. Se trata de los Apóstoles  Jayawanth Amathi, Herald Kirti Kumar Jacob, Morris Lal, Vinod Kumar Sahae y del Obispo Sunil Kumar Minzee. El Apóstol Mayor Schneider les dio las gracias de todo corazón por los muchos años que han servido al Señor y a los hermanos, en amor, fidelidad y humildad. Les deseó un descanso lleno de bendiciones.

Servicio divino para jóvenes en Camp

El viernes por la mañana, el líder de la Iglesia internacional fortaleció los Apóstoles, los Obispos y sus esposas. El agradecimiento fue dirigido especialmente hacia el esfuerzo sin cansar. La tarde comenzó con un servicio divino para la juventud en el que el Apóstol Mayor hizo un llamamiento a los hermanos jóvenes a confiar en el Señor en todas las situaciones y a aplicar sus dones y virtudes en la comunidad. En este servicio divino fueron ordenados un Apóstol para la India (Pravin Gajbhiv de 38 años9 así como cuatro Obispos para la India, un Obispo para Bangladesh y otro para Nepal. Todos ellos trabajarán a partir de ahora bajo la conducción del Apóstol de Distrito Mark Woll (Canadá).

De camino hacia Udaipur

El día siguiente fue día de viaje: desde Hyderabad el grupo voló vía Mumbai a Udaipur. Las comunidades nuevoapostólicas de esta provincia estaban hasta ese momento bajo la conducción del Apóstol de Distrito Armin Brinkmann de Alemania. El domingo se celebró el servicio divino en Udaipur en el que el Apóstol Mayor le confió al hasta entonces Obispo Lazrus Patel (59) el ministerio de Apóstol. A continuación el cabeza de la Iglesia prosiguió con el cambio anunciado en la organización: a partir de ahora las provincias, que anteriormente estaban bajo el cuidado de la Iglesia Nueva Apostólica de Renania del Norte Westfalia, recibirán la atención de la iglesia regional de Canadá. Con ello el Apóstol de Distrito Mark Woll y el Ayudante de Apóstol de Distrito David Devaraj asumen la responsabilidad.

Sobre este tema escribe el Apóstol de Distrito Armin Brinkmann: «Estamos agradecidos por tener muchas comunidades estables y portadores de ministerio fieles aquí. Hemos trabajado con mucha alegría en estas regiones, damos gracias por la bendición de Dios, Su ayuda y Su acompañamiento y deseamos que, como en todos los lugares, la novia se prepare para el regreso de Jesucristo. Hace 20 años, al comenzar nuestra labor, tuvimos la palabra bíblica: «Ninguno que poniendo su mano en el arado mira hacia atrás, es apto para el reino de Dios» (Lucas 9:62). Ahora la iglesia regional de Canadá tomará las riendas. Nosotros apoyaremos en oración todos los futuros esfuerzos.»

Impresiones y observaciones

Además, el Apóstol de Distrito Brinkmann describe algunas impresiones del país: «De camino de Hyderabad a Udaipur tuvimos algunas horas de retraso en Mumbai, una de las grandes ciudades millonarias en la India. Muchas personas viven en la calle, debajo de puentes o de las llamadas "Overflights". Los niños duermen en hamacas en tráfico denso, las personas han construido casas improvisadas sobre las aceras. Cuando uno luego ve las imágenes de destrucción causada por el huracán "Haiyan" en las Filipinas, se es consciente de la impotencia humana ante las fuerzas de la naturaleza y las relaciones sociales. Todas estas cosas no son fáciles de arreglar con dinero y donaciones. Por tanto son muy necesarias nuestras oraciones.»