¡Cristo, nuestro futuro!

El año 2020 estuvo marcado por la pandemia del coronavirus. Pero hay una cosa que esta crisis no nos ha podido quitar: ¡nuestra confianza en Dios! Él es y sigue siendo nuestro Padre celestial, que solo quiere lo mejor para sus hijos.

Esta fe también debería determinar nuestro futuro. Aunque no sabemos lo que nos depara este nuevo año 2021, lo comenzamos con la certeza de que Jesús vendrá pronto. Esta es la meta de nuestra fe. Por eso, nuestro lema para este año es: “¡Cristo, nuestro futuro!”.

  • Cristo es nuestro futuro, pues Él nos da seguridad. En Él encontramos la energía y la motivación para perseverar en nuestro camino de la fe. Ni las dificultades de la vida ni el comportamiento de los demás deben desanimarnos. Vayamos decididamente hacia la meta.
  • Cristo es nuestro futuro, pues Él es nuestra salvación y nos quiere perfeccionar. Su muerte y resurrección son la base de ello. Él sabe que podemos alcanzar la salvación y nos provee de todo lo necesario para este propósito. La promesa del Señor de que perfeccionará su obra, es segura. Si permanecemos fieles a Él, podemos esperar su gracia. Y podemos estar seguros de que su gloria eclipsará todas nuestras penas.
  • Cristo es nuestro futuro, pues Él es nuestra solución para el futuro. Ahora bien, depende de nosotros cómo vivimos, cómo actuamos, cómo creemos. Para vivir con Cristo para siempre, buscamos ya hoy la comunión con Él. Su Evangelio es el fundamento sobre el que construimos nuestro matrimonio, nuestra familia y nos relacionamos con nuestro prójimo. Jesucristo es el modelo según el cual queremos conformarnos.

Para el nuevo año os deseo a todos pensamientos y experiencias llenos de paz. ¡Que la bendición de Dios os acompañe y que la paz del Resucitado esté con vosotros! Mantengamos nuestra confianza en Jesucristo, porque nuestro futuro espiritual depende de ello. ¡Manteniendo nuestros ojos puestos en Cristo, alcanzaremos la meta!

Cordiales saludos
Jean-Luc Schneider

Enero 2021