Por qué oramos

A veces los niños preguntan: “¿Por qué tenemos que orar? Dios lo sabe todo, Él conoce a cada uno”.

En primer lugar, la oración es una oportunidad para expresar nuestra gratitud. Y como estamos tan agradecidos a nuestro Padre celestial por todo lo que nos ha dado, sentimos la necesidad de decirlo.

Cuando oramos, también expresamos nuestro respeto, nuestro temor a Dios. Somos conscientes de que lo necesitamos y de que sin Él no somos nada, no tenemos nada.

En nuestra oración también expresamos nuestra confianza en Dios: “Dios, confío en ti, puedo contártelo todo. Dios, confío en tu poder, tú puedes ayudar, tú puedes hacerlo”.

Y la oración es una expresión de nuestro amor a Dios. Hablamos con Él, sentimos la necesidad de hablarle porque lo amamos.

Nuestra oración, cuando intercedemos por nuestro prójimo, es una expresión de nuestro amor al prójimo. Seguramente Dios no necesita nuestra oración para saber lo que necesita nuestro prójimo. Pero necesitamos expresar nuestro amor por el prójimo; por eso oramos por él.

De un Servicio Divino del Apóstol Mayor

Septiembre 2023