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El Catecismo en preguntas y respuestas
- Prefacio
- Índice
- 1. ¿Dónde está el origen de la fe en Dios?
- 2. ¿Cómo se revela Dios?
- 3. ¿Cómo se muestra Dios en la naturaleza?
- 4. ¿Cómo se muestra Dios en la historia?
- 5. ¿Cómo qué se da a conocer Dios?
- 6. ¿Dónde están registradas las revelaciones de Dios?
- 7. ¿Brinda Dios revelaciones sobre el futuro?
- 8. ¿Existen otros reconocimientos sobre el obrar de Dios?
- 9. ¿Cómo debe comportarse el hombre frente a las revelaciones de Dios?
- 10. ¿Qué entendemos por la fe como respuesta a las revelaciones de Dios?
- 11. ¿Cómo llega el hombre a tener fe?
- 12. ¿Qué es la Sagrada Escritura?
- 13. ¿Quién es el autor de la Sagrada Escritura?
- 14. Los textos de los libros bíblicos, ¿han sido transmitidos de manera confiable?
- 15. ¿Cómo se llevó a cabo la compilación de los libros bíblicos?
- 16. ¿Qué estructura y contenido tiene la Sagrada Escritura?
- 17. ¿Qué contiene el Antiguo Testamento?
- 18. ¿Qué contiene el Nuevo Testamento?
- 19. ¿Qué división, número y orden tienen los libros del Antiguo Testamento?
- 20. ¿Qué libros bíblicos forman parte de los apócrifos?
- 21. ¿Qué valor se le asigna a los apócrifos en la Iglesia Nueva Apostólica?
- 22. ¿Qué división, número y orden tienen los libros del Nuevo Testamento?
- 23. ¿Qué importancia tiene la Sagrada Escritura para la Iglesia Nueva Apostólica?
- 24. ¿Quién ha sido llamado para interpretar la Sagrada Escritura?
- 25. ¿Qué se entiende con la expresión: “Jesucristo es el centro de la Escritura”?
- 26. ¿Qué importancia tiene la Sagrada Escritura para el creyente?
- 27. ¿Qué contribuye a que la dedicación a la Biblia fortalezca la fe?
- 28. ¿Cuál es el fundamento y el contenido de la fe cristiana?
24. ¿Quién ha sido llamado para interpretar la Sagrada Escritura?
La interpretación correcta de la Sagrada Escritura es revelada en toda su profundidad únicamente por el obrar del Espíritu Santo. Interpretar la Sagrada Escritura para la doctrina y la práctica de la fe, es parte del encargo de los Apóstoles de Jesús.
“Así, pues, téngannos los hombres por servidores de Cristo, y administradores de los misterios de Dios”
1 Corintios 4:1