El Catecismo de la Iglesia Nueva Apostólica

2.4.9 El noveno artículo de la fe

Yo creo que el Señor Jesús vendrá nuevamente tan seguro como ascendió al cielo y que tomará consigo a las primicias de los muertos y los vivos que esperaron su venida y fueron preparadas; que después de las bodas en el cielo regresará con ellas a la tierra, establecerá su reino de paz y ellas reinarán con Él como el sacerdocio real. Al finalizar el reino de paz, Él hará el juicio final. Luego Dios creará un cielo nuevo y una tierra nueva y morará junto a su pueblo.

El noveno artículo de la fe constituye una precisión escatológica de los enunciados correspondientes al segundo y tercer artículo (retorno de Cristo, resurrección de los muertos, vida eterna). Lo detallado que es este artículo demuestra el gran valor que se le atribuye dentro de la fe nuevoapostólica a los acontecimientos del futuro.

Al comienzo este artículo se refiere a Hechos1:11: “Este mismo Jesús, que ha sido tomado de vosotros al cielo, así vendrá como le habéis visto ir al cielo". Además, este artículo se conecta con los enunciados escatológicos del segundo artículo de la fe.

Unido al retorno de Jesucristo va el hecho de que el Señor “tomará consigo a las primicias de los muertos y los vivos que esperaron su venida y fueron preparadas" (comparar con 1Ts.4:16-17). Las “primicias de los muertos y los vivos" serán provistas de un cuerpo espiritual y serán arrebatadas hacia Cristo en su retorno. Las “primicias" son aquellos que llegaron a ser propiedad de Dios, que tenían una esperanza viva en la venida del Señor y se han dejado preparar para el retorno de Cristo.

El retorno de Cristo es el acontecimiento central del cual dependen otros acontecimientos escatológicos. El arrebatamiento de “los vivos y los muertos" tiene como objetivo la comunión con Jesucristo, cuya imagen son las “bodas en el cielo". Las “bodas en el cielo" constituyen el comienzo de la comunión inmediata del Señor y la comunidad nupcial.

Las “bodas en el cielo" son de duración limitada. Al término de ellas, Jesucristo se dirigirá junto con los suyos a todos aquellos hombres que no han tenido parte en ese acontecimiento. Entonces Jesucristo aparecerá visible en la tierra, donde erigirá “su reino de paz" (Ap.20:4 y 6). Como “real sacerdocio" (1P.2:9; Ap.20:6), la comunidad nupcial, cuyo símbolo numérico es “ciento cuarenta y cuatro mil" (Ap. 14:1), tendrá parte en el reinado de Cristo. El Evangelio será anunciado a todos los hombres, a los vivos y a los muertos.

Recién “al finalizar el reino de paz, Él [Jesucristo] hará el juicio final". Entonces se verá en toda la creación que Jesucristo es el Juez justo ante el cual no queda nada escondido (Jn.5:22 y 26-27).

La última frase del noveno artículo de la fe transmite una visión de la nueva creación de Dios: “Luego Dios creará un cielo nuevo y una tierra nueva y morará junto a su pueblo". Apocalipsis 21 y 22 se refieren, entre otros, a la nueva creación; será un espacio que contará con la plena presencia de Dios. Cuando se dice que Dios morará entonces junto a su pueblo, esto se refiere a una forma completamente nueva de existencia con Dios, la “vida eterna", mencionada al final del tercer artículo.