El Catecismo de la Iglesia Nueva Apostólica

7.2 Origen del ministerio en la Iglesia

El ministerio espiritual se basa en el envío de Jesucristo por el Padre; Jesús es Rey, Sacerdote y Profeta (ver 3.4.7). Como el Enviado de su Padre, tuvo el poder, la bendición y la santificación para redimir a la humanidad.

Ya en el antiguo pacto hubo en la Iglesia antecesores del ministerio. Sin embargo, existe una considerable diferencia entre el ministerio del antiguo pacto y el del nuevo pacto. Hebreos 8:6 dice al respecto: “Pero ahora tanto mejor ministerio es el suyo [de Jesús], cuanto es mediador de un mejor pacto ...".

Jesús instituyó el ministerio para su Iglesia a través del llamamiento y el envío de los Apóstoles.

La Iglesia de Jesucristo se manifestó en su realización histórica en Pentecostés. En ese momento también comienza en la Iglesia la actividad del ministerio. Pero Jesucristo ya había dado antes a sus Apóstoles el ministerio en sí; Él los había equipado con poder, bendición y Espíritu Santo (Jn. 20:21-23). Los Apóstoles son los enviados de Jesús.