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El Catecismo de la Iglesia Nueva Apostólica
- Índice
- 8.2.1 Nombres del Sacramento
- 8.2.2 Indicaciones del Antiguo Testamento sobre la Santa Cena
- 8.2.3 Los milagros de Jesús sobre la alimentación y la Santa Cena
- 8.2.4 La cena de Pascua
- 8.2.5 La institución de la Santa Cena por Jesucristo
- 8.2.6 La Santa Cena en la primera epístola a los Corintios
- 8.2.7 Significado de pan y vino
- 8.2.8 La Santa Cena como cena de conmemoración
- 8.2.9 La Santa Cena como cena de confesión
- 8.2.10 La Santa Cena como cena de comunión
- 8.2.11 La Santa Cena como cena del tiempo final
- 8.2.12 La verdadera presencia de cuerpo y sangre de Cristo en la Santa Cena
- 8.2.13 La verdadera presencia del sacrificio de Jesucristo en la Santa Cena
- 8.2.14 Relación del perdón de los pecados y la Santa Cena
- 8.2.15 La Santa Cena y el ministerio de Apóstol
- 8.2.16 Las palabras de consagración de la Santa Cena
- 8.2.17 El festejo y la recepción de la Santa Cena
- 8.2.18 Condiciones previas para recibir la Santa Cena
- 8.2.19 Cómo se recibe la Santa Cena
- 8.2.20 Efectos de la Santa Cena
- 8.2.21 Derecho para participar de la Santa Cena
- 8.2.22 Celebración de la Santa Cena en las Iglesias
8.2.4 La cena de Pascua
Por indicación de Dios, los israelitas celebraron la primera cena pascual en la noche anterior a la salida de Egipto. A tal efecto sacrificaron y prepararon corderos sin defectos. Los comieron acompañados de pan sin levadura. La sangre del cordero, con la cual pintaron los postes de las puertas, fue la señal para quedar liberados de la décima plaga que sobrevendría sobre Egipto, la muerte de los primogénitos (Ex. 12).
Dios mandó celebrar la cena de Pascua cada año en conmemoración de la liberación de Egipto.
Las semejanzas entre la cena de Pascua y la Santa Cena son evidentes: ambas son cenas de conmemoración, en las que el pan es un componente imprescindible. La copa de vino que se bebe al final del festejo de la cena pascual, simboliza la alegría generada por la liberación del cautiverio egipcio. La sangre del cordero pascual que salvó a los primogénitos de los israelitas, es una referencia a Jesucristo como el “Cordero de Dios" que es sacrificado. “He aquí el Cordero de Dios, que quita el pecado del mundo" (Jn. 1:29; comparar con 1 P. 1:19).
En la cena de Pascua se recuerda la liberación de los israelitas de la cautividad de los egipcios. La Santa Cena hace referencia a la liberación en un sentido mucho más amplio, esto es: a la redención de los hombres de la cautividad del pecado a través del sacrificio de Cristo y a la salvación de la muerte eterna.