El Catecismo en preguntas y respuestas

166. ¿Cómo se comportaron los Apóstoles?

Simón Pedro desenvainó la espada para proteger a Jesús y le cortó una oreja al siervo de un sumo sacerdote (cf. Juan 18:10). Pero Jesús lo retuvo y curó al siervo.
Jesús no hizo uso de su poder divino, sino que se dejó prender. Entonces los Apóstoles lo abandonaron y huyeron. Cuando Simón Pedro esa noche fue abordado y le fue dicho que era un discípulo de Jesús, él lo desmintió. Negó al Señor tres veces.

“Pedro estaba sentado fuera en el patio; y se le acercó una criada, diciendo: Tú también estabas con Jesús el galileo. Mas él negó delante de todos, diciendo: No sé lo que dices. Saliendo él a la puerta, le vio otra, y dijo a los que estaban allí: También éste estaba con Jesús el nazareno. Pero él negó otra vez con juramento: No conozco al hombre. Un poco después, acercándose los que por allí estaban, dijeron a Pedro: Verdaderamente también tú eres de ellos, porque aun tu manera de hablar te descubre. Entonces él comenzó a maldecir, y a jurar: No conozco al hombre. Y en seguida cantó el gallo. Entonces Pedro se acordó de las palabras de Jesús, que le había dicho: Antes que cante el gallo, me negarás tres veces. Y saliendo fuera, lloró amargamente”
Mateo 26:69-75