Guía de orientación para portadores de ministerio

4.6.6 Servicio Divino de casamiento

Los Servicios Divinos de casamiento son Servicios Divinos de palabra realizados por separado con un acto de bendición: la dispensación de la bendición de casamiento. Son oficiados por el apostolado o por portadores del ministerio de Pastor y, en lo posible, deberían tener lugar en una iglesia o en algún otro lugar digno. El Servicio Divino de casamiento no debería durar más de 45 minutos.

Al comienzo del Servicio Divino de casamiento pueden entrar los novios. La entrada puede ser acompañada por música; la comunidad se pone de pie para ello. Después se celebra el Servicio Divino de casamiento de la siguiente manera:

  • Canto inicial
  • Introducción trinitaria (luego pausa del orador)
  • Oración inicial
  • Lectura del texto bíblico
  • Aporte musical
  • Prédica
  • Aporte musical (opcional)
  • Alocución a los novios
  • Dado el caso, matrimonio civil
  • Pregunta a los novios o voto de fidelidad mutua
  • “Intercambio de anillos” (opcional)
  • Dispensación de la bendición de casamiento
  • Palabra de saludo/deseos de bendición u oración por ministros de otra confesión cristiana (opcional[39]
  • Aporte musical
  • Padre Nuestro (opcional)
  • Oración final
  • Bendición final
  • Triple amén

Para las oraciones, la pregunta a los novios o el voto de fidelidad mutua, el “intercambio de anillos” y la bendición de casamiento, la comunidad permanece de pie.

Preguntas del siervo oficiante en caso de que el casamiento civil se efectúe en la Iglesia

Si la Iglesia también celebra el matrimonio civil o tradicional, esto tiene lugar después de la alocución del siervo oficiante y antes de la bendición de casamiento. Los novios pronuncian sus votos matrimoniales. Las preguntas a los novios se rigen por las respectivas disposiciones legales. Después de que los novios hayan pronunciado sus votos o hayan dado su consentimiento, el siervo oficiante los declara legalmente casados en virtud de la autoridad del derecho civil.

Litúrgicamente le siguen las preguntas a los novios antes de la bendición de casamiento o bien ellos expresan un voto de fidelidad mutua.

Preguntas a los novios antes de la bendición de casamiento

Antes de la dispensación de la bendición de casamiento, el siervo oficiante pide el “sí” a los novios. Según la tradición regional, se les puede preguntar a los novios separada o conjuntamente. Las preguntas deben tener los siguientes contenidos:

Se les pregunta al novio y la novia si quieren

  • reconocer al esposo o la esposa que tienen a su lado como una dádiva de Dios,
  • ayudarse entre ellos en todas las situaciones y mantenerse fieles uno al otro mientras vivan,
  • tratarse con amor y valoración mutuos, y orientar su vida en común en los mandamientos divinos obrando conforme a ellos.

Después del consentimiento, el siervo oficiante imparte a los novios la bendición de casamiento.

Voto de fidelidad mutua de los novios antes de la bendición de casamiento

Como alternativa a las preguntas efectuadas a los novios por el siervo oficiante, los novios pueden pronunciar antes de la bendición de casamiento un voto de fidelidad mutua, en el que repiten el texto vinculante que lee el siervo oficiante o bien lo leen ellos mismos. Mientras tanto los novios se miran uno al otro.

Primero tendrá lugar el voto de fidelidad del novio; él dice:
“Yo, (nombre del novio), te reconozco, (nombre de la novia), como dádiva de Dios y te prometo delante de Dios y esta comunidad mi amor y fidelidad tanto en días buenos como en días malos. Quiero orientar mi vida matrimonial en los mandamientos divinos, valorarte y apoyarte mientras viva. ¡Que en ello Dios me ayude! Amén”.

A continuación, sigue el voto de fidelidad de la novia; ella dice:
“Yo, (nombre de la novia), te reconozco, (nombre del novio), como dádiva de Dios y te prometo delante de Dios y esta comunidad mi amor y fidelidad tanto en días buenos como en días malos. Quiero orientar mi vida matrimonial en los mandamientos divinos, valorarte y apoyarte mientras viva. ¡Que en ello Dios me ayude! Amén”.

Luego es dispensada la bendición de casamiento.

“Intercambio de anillos” de los novios

Existe la posibilidad de que en el Servicio Divino de casamiento los novios se coloquen los anillos uno al otro (“intercambio de anillos”). Si lo desean, el siervo oficiante se lo pide después del “sí” o del voto de fidelidad y antes de la dispensación de la bendición de casamiento. El “intercambio de anillos” acontece sin que en ese momento se pronuncien palabras.

Según la tradición regional, también puede tener lugar antes del voto de fidelidad mutua, así como también antes del casamiento civil.

Breve oración intermedia (opcional)

Dispensación de la bendición de casamiento

El siervo oficiante imparte la bendición de casamiento poniendo su mano sobre las manos derechas extendidas de los novios y diciendo lo siguiente, conforme al sentido:
“Recibid la bendición de Dios para vuestro matrimonio en el nombre de Dios, el Padre, el Hijo y el Espíritu Santo”.

Además, la bendición de casamiento puede comprender los siguientes deseos de bendición:

  • Dios, vuestro Padre y Creador, os conduzca en la vida y os conceda protección, sustento y asistencia.
  • Dios, el Hijo, que es vuestro Redentor, os lleve a la vida eterna.
  • Dios, el Espíritu Santo, os guíe y os conceda sabiduría.
  • El trino Dios os fortaleza en vuestro amor y fidelidad de uno hacia el otro.
  • ¡La paz del Resucitado esté con vosotros!

La bendición de casamiento finaliza con amén. A continuación, el siervo oficiante felicita a la pareja.

Si lo desea la pareja, en el caso de que uno de sus integrantes pertenezca a otra confesión, en este momento un ministro de la confesión del cónyuge no nuevoapostólico puede pronunciar una palabra de saludo, palabras de bendición o una oración y felicitar a ambos. Sin embargo, no tendrá lugar una dispensación de bendición en conjunto ni tampoco adicional. El aporte del ministro se realiza delante del altar.[40]

El Servicio Divino de casamiento termina con la oración final, la bendición final y el triple amén.

En relación con el casamiento, se les puede dar mayor amplitud a las interpretaciones musicales. Todas las presentaciones musicales deben estar en consonancia con lo que va sucediendo en el Servicio Divino.


[39] cf. Nº 10.1.1.3 Ecumenismo: Casamiento