Guía de orientación para portadores de ministerio

4.6.5 Servicio Divino de desconsagración

Si una iglesia y lugar destinado a celebrar Servicios Divinos ya no se utiliza para ese fin, se realizará una desconsagración. Después de la desconsagración, son edificios ordinarios a los que se puede dar otro uso.

Servicio Divino con desconsagración de una iglesia/un lugar destinado a celebrar Servicios Divinos

La desconsagración se realiza en el marco de un Servicio Divino con dispensación de Sacramento. Por lo general, el último Servicio Divino es realizado por el Apóstol. Puede delegar la desconsagración a portadores del ministerio de Pastor.

En este Servicio Divino, por lo general, se efectúa una retrospectiva. Se puede leer la crónica de la comunidad.

Por último, se da las gracias a todos los que han participado en la vida de la comunidad.

Si, en relación con la desconsagración, la comunidad se fusiona con otra, también puede tener lugar en este Servicio Divino la confirmación de los portadores de ministerio.

En la oración final del Servicio Divino de desconsagración se debería mencionar lo siguiente:

  • Agradecimiento por haberse podido reunir la comunidad en este edificio y haber sido siempre un lugar de refugio ante las preocupaciones y cargas de la vida cotidiana.
  • Agradecimiento por haberse experimentado aquí la presencia del trino Dios en palabras, Sacramentos y bendición.
  • Petición para que los miembros de la comunidad puedan conservar la fe y queden preservados en la nueva comunidad o bien, dado el caso, petición por una vida bendecida de la comunidad en el nuevo edificio de la iglesia.

La oración final termina con “amén”.

Sigue a continuación la desconsagración con las siguientes palabras:
“En el nombre de Dios, el Padre, el Hijo y el Espíritu Santo, desconsagro este lugar. A partir de ahora ya no será un lugar donde estará activo el Espíritu Santo. Que la paz de Dios acompañe a la comunidad en su futuro camino. Amén”.

La desconsagración se realiza sin gesto de bendición. Siguen de inmediato la bendición final y el triple amén.

En caso de que sea habitual regionalmente, después del aporte musical de cierre los portadores de ministerio pueden llevarse del recinto donde se realizó el Servicio Divino, la Biblia (símbolo de la palabra de Dios) y los recipientes de la Santa Cena (símbolo de los Sacramentos).